¡A los artistas y amantes de las artes!
Proponemos un simple, simplísimo acto de amor. Proponemos un sencillo hecho para hacer más linda la vida de los que nos rodean y que hacen algo en el arte: proponemos decirnos cosas amables. Eso, nada más. Si sos artista o si te detienes ante una obra cualquiera, animáte, decíle al autor algo lindo. Ojo! No pedimos que mientas. No, por favor mentiras no. Decí algo positivo. Sabemos que requiere un esfuerzo. Muchas veces nos podemos encontrar ante algo fulero o que no es lo que frecuentamos, pero aún así, por favor hacé el esfuerzo. Creemos que puede ser gratificante. Dale. Esa persona dedicó su tiempo, sus manos, su piel o su cerebro, su cariño a algo con el objetivo de hacer que el mundo fuera menos horrible, para que alguien la pase bien un ratito, o lo hizo porque lo necesitaba, o no sé no importa porqué lo hizo. Está ahí delante de ti mostrándote lo que hizo. No te puede costar menos que un instante. Damos como ejemplo algunas frases amables: “Me gusta”, Qué bien, es lindo o linda”, no son palabras tan difíciles… Y si sos artista sabés de lo que hablamos. No hay nada peor que la indiferencia, que alguien pase por tu obra sin rescatar nada, en silencio con los ojitos pensando en otra cosa, por eso vos no lo hagas también. Entendemos que algo puede no gustarte, pero seamos tolerantes aún con aquellos a los que no podemos de dejar de considerar malos artistas, merecen otra oportunidad. Y nosotros no nos merecemos ser los verdugos castrados y malditos que tienen el gusto hipertrofiado de refinamiento. La consigna es ser amables. Especialmente con aquellos que son artistas jóvenes, nóveles que están padeciendo las cosquillas en la panza que les provoca crear. No prometemos paraísos para el que haga este bien, pero aseguro que en este ancho y amargo mundo cosecharemos sonrisas por doquier…
Ser amables con el prójimo artista no es ser hipócrita. Si así lo sientes, no lo hagas, no hagas nada. Está bien. Si te parece adulonería barata, pues también vete, o quédate. No sé hacé como quieras. Solo te pedimos: no te asustes. El miedo y la vergüenza son los peores consejeros… si eres bueno creando, pues a crear hermano. Si a veces estás muy solo y quieres compañía, solo ven como eres, que estará bien también. Pero luego no te arrepientas. Queremos ser amables, no fáciles tontuelos ante el arte. Queremos valorar el ardor, el trabajo, la dedicación que los artistas le ponen a sus obras. Si creemos útil un consejo lo daremos o lo recibiremos… hagamos el bien (y esto que no sea leído como una inocencia, de hecho no es)… que otros e queden con el gran mérito del desprecio, el orgullo vano, el rencor, la intelectualidad purificada y criticona. Allá ellos, está bien. El arte nos dice cosas creemos. Nos dice cosas maravillosas más allá del sentido común, de los prejuicios del lenguaje. Nos habla de eso desconocido y escondido que alguien llama alma. El arte creemos, viene a llenar o a regar ese centro nuestro tan ajeno y opaco, que es nuestra nada, nuestra muerte nuestro ser social. El arte no hace ser creemos. Y eso se lo debemos a cada obra y a cada artista detrás… como sea, por favor, más allá de criterios seamos amables así alguien varios quizá, estarán satisfechos.
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