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miércoles, abril 18, 2012

foto vieja - m. r. esteban



te veo en una foto vieja
te reís
antes
en el pasado
te reís
una sonrisa
de nube
hacia adelante
está volviendo tu cara
hacia una costa
(creo)
en el horizonte
está por salirle el sol
a todo ese cielo
en esa foto vieja
caminás con alguien
a tu lado
estaba yo en otro lugar
en otra foto ese día
otro pasado el mío
distintos somos
fuimos



lunes, agosto 08, 2011

poema - m. r. esteban



hay un hombre gritando
afuera
al otro lado de la calle
enfrente hay un bar
un boliche
le grita a otro
están cerrando
es tarde hace frío
se despiden se ríen
suspendo la escritura
es imposible ser
más realista
ahora pasa un carro
........................
los caballos dejan
sus puntos suspensivos en el aire
alguien lo dijo antes me parece
lo pienso y no recuerdo
mientras me voy a dormir
la siesta
realismo siestero


jueves, julio 21, 2011

llovizna - m. r. esteban



había
una llovizna en la tarde
en una plaza una llovizna
en una tarde en una plaza
había
dos seres
en la llovizna
en la plaza
en la tarde
éramos nosotros

l  o    r  e  c  u  e  r  d  a  s  ?

los engranajes de mi memoria
oxidados
impedidos
inventan
una llovizna
una tarde
una plaza
un nosotros


martes, julio 19, 2011

nuca - m. r. esteban


los techos lloraban
sus gotas de rocío
la noche que nos dejamos
es lo único que recuerdo
también que yo te grité
te llamé
pero ese sonido no tiene palabras
también recuerdo
esperar a que te detuvieras
o te dieras vuelta
para ver tus ojos tan lejos
pero solo vi tu nuca
hasta que doblaste
en la esquina

lunes, julio 18, 2011

bici roja - m. r. esteban



la bici está medio despintada
                               la pintura
                                      roja
                                        está
                                           cachada

en algunas partes
pero es mía
no le voy a poner motor
ese corazón de mosca
como le hacen ahora
es mía me la compré
porque vendí un chancho
de los que estuve cuidándole
a mi padre / con ese chancho me pagó
el trabajo
yo me la compré a la aurorita
con ella alcanzo el viento
me parece
y hago unas piruetas
de las que estoy orgulloso
somos
yo y mi bicicleta roja
pedaleando
por la calles del pueblo
a la par del viento



miércoles, julio 06, 2011

un poema - m. r. esteban

Amor teatral

la función ha comenzado / al fin
por ti amor teatral  / puedo fingir
que soy feliz / y reír reír reír /
y actuar que muero de la risa /
ten en cuenta / que este protagonista
solo sabe ser otro / mentir
porque mi cara / en la verdad / es negra
siniestra / una guerra despareja
cruel / mi cuerpo tiene tentáculos varios
y lo cruzan oscuros nervios
y llevo atuendos que no son míos
cumplo lo que pide la didascalia y el guión
el olor del maquillaje me embriaga
el monólogo del loco empuja para salir escupido al proscenio
repito mis líneas y le cierro mis ojos al silencio
mundial de la sala
me duele la cara
sangro por todos los poros
se tuerce mi rostro de dolor
y la careta del loco que ríe ni se entera
aplausos de júbilo
explosivos aullidos
yo me muero ahí nomás / no llego a mi camerino

¿estás en tu butaca?
¿qué te ha parecido mi actuación?

* ésta es la primera función la suerte del debut nos sonríe y mi acto fue lo mejorcito del programa ya que al fin luego de un fogonazo he muerto entre el humo y la luz el público de pie ruge hambriento pide bises 

martes, julio 05, 2011

:) caritas :(

:) 


estás tan bien sin mí/ hoy lo vi en tu blog/ tan lejos 
estás/ en tu casa estás/ calentita decís/ tomando un 
tecito pusiste/ fotos de masitas con facebook y unas 
amigas jajajaja/ dedito para arriba/ sos muy feliz/ 
me gusta/ el finde/ dale/ todo bien/ 
            aunque 
                         yo 
                                  e 
                                          sté 
                                                    re 
                                                             ca 
                                                                       gán 
                                                                                   do 
                                                                                              me 
                                                                 de frío 
                                                                           de adentro para afuera

:(

4º crónica marosiana - m. r. esteban

La duquesa

Viene a visitarnos la duquesa de york. Se llama ----- pero con mis hermanos la llamamos duquesa. Es que es muy parecida a la verdadera. Nos matamos de risa cuando la vimos en la revista hola. Lleva un peinado alto con una cinta púrpura como la realeza europea que a nosotros nos gusta tanto. Cuando viene nosotros le hacemos reverencias y cuando nos mandan a la pieza porque están hablando cosas de grandes la dibujamos y a mí me sale igualita. Y entonces tomamos el té con el dibujo con las tazas de mi hermana que le regaló mi abuela. Estamos en algún derby importante con sombreros y caballos y yeguas y con la reina en su carruaje arrugado y con el pasto muy verde. A mí me gusta usar monóculo porque me da risa el nombre. La duquesa tiene un marido pirata que siempre anda con un saco grueso para los fríos australes del mismo color del parche de su ojo izquierdo. Cuando llegan estacionan su barco de velas en la pequeña ensenada de la laguna frente a mi casa. Cuando se van escuchamos leven anclas. Es eso lo que grita el marido pirata de la duquesa mientras maldice.







viernes, febrero 18, 2011

Próximamente en la ciudad de La Plata..........


Sexta FLIA

en el Centro Cultural Daniel Omar Favero
117 esquina 40




Sábado 2 de abril
y
Domingo 3 de abril
del 2011















participá con un puesto
confirmalo para ser agregado a la grilla

puestosflialp@gmail.com


para un espacio en el escenario

escenarioflialp@gmail.com


si sos artista visual

artevisualflialp@gmail.com

más información
http://flia-laplata.blogspot.com/



lunes, noviembre 29, 2010

se viene la QUINTA FLIA-La Plata en Estación Circunvalación


4 y 5 de diciembre

Centro Cultural "ESTACIÓN CIRCUNVALACIÓN"

rambla de avenida circunvalación 72 y calle 12

allí estaremos desde temprano
nos vemos



lunes, noviembre 22, 2010

en el inodoro -- M.R. Esteban


a veces

cuando estoy en el inodoro

pienso cómo podría haber sido

la vida de mi madre

si yo no hubiera nacido

hubiera sido cantante

o gerente de banco

no sé

o cocotte en un club de montmartre

o cocinera en un macdonalds del bronx

no sé

quizás la madre un futbolista

teñida aburrida divorciada

no sé

libre

no sé

la vida no se extiende más atrás del inodoro me digo

el futuro no es hijo del pasado

lo engendra el presente

no sé

un vez que tiro la cadena

y mis deshechos se van

me olvido

eso es el presente

y el futuro

y el pasado

fin

he concluido








sábado, noviembre 06, 2010

Lavandina



“¡Más ropa blanca ha lavado mi madre
que la que tú puedes comprar!”
me dijo mi amada.
Y, entonces, mis ojos lloraron desconsolados,
deshojándose en mis hambrientos huesos…
“¡Soy pobre! ¡Vete mujer codiciosa!”
le dije, ya sin el alma en la voz…
Y mis manos, como garras de dolor
se sacudían enfermas…
“Pero antes, mira los trapos que dejas,
el corazón que arrojas,
los frascos que guardarás,
las botellas de lavandina…
allí estarán mis ojos…”






miércoles, octubre 13, 2010

Lectura en la biblioteca popular "Alejo Iglesias" de Villa Elisa



Identikit

El asesino más eficaz del mundotiene un método que quizás sea magia oral, o un defecto natural o puro y pedestre azar. Su método consiste en pronunciar el nombre de la víctima en la oscuridad y rodeado de completa soledad. Él ignoró esta cualidad suya hasta que una noche dijo el nombre de la mujer que amaba.

martes, agosto 31, 2010

Se viene la 4º FLIA en La Plata - Vamo que todavía! Agendenlón!!!!



Lugar: Centro Social y Cultural “Mansión Obrera”, calle Nueva York y pasaje Wilde, Berisso.
En febrero del 2002, vecinos de la calle Nueva York se empezaron a juntar en una esquina para organizarse contra la crisis; de ahí surgió el MTD (Movimiento de Trabajadores de Desocupados) de Berisso. Mediante asambleas y cortes de calles no sólo consiguieron subsidios para los vecinos sin trabajo, sino que abrieron un merendero, un comedor, armaron un horno de barro y una huerta comunitaria.
En el invierno del ‘04, okuparon un local abandonado (que antes era un cabaret) con el objetivo de crear la sede del Movimiento. Hubo que limpiarlo, colocar el techo y realizarle otras mejoras edilicias. Ahí se inauguró la carpintería del MTD, que funciona de lunes a viernes y donde trabaja un puñado de compañeros. Para esa época, el MTD de Berisso pasó a formar parte del Frente Popular “Darío Santillán”.
 El centro cultural “Mansión Obrera” (sobre el pasaje Wilde, a la vuelta del MTD) es cedido por un vecino del barrio en el verano del ‘05. Allí se dictan talleres de comunicación tanto para niños, adolescentes y adultos -video, revista, fotografía, radio, stencil, mural- y además, un taller de percusión.
 En la primavera del ‘08, se tomó un baldío (frente al local del MTD), se lo limpió y se construyó una plaza, donde también se realizan los Mercados Populares, y jornadas culturales con actividades lúdicas y barrileteadas. En mayo del ‘10, se consiguieron un transmisor y una antena, y se creó FM “Barrio” (98,5 Mhz) una radio comunitaria que funciona de manera precaria y provisoria, en la cocina del MTD.
 Por todo lo que se ha hecho y se hace para transformar imaginativamente la realidad, basado en la autogestión y la solidaridad, la cuarta FLIA LP se realiza hoy en esta calle, donde en varias paredes todavía se puede leer la consigna de los MTDs: “Trabajo, Dignidad, Cambio Social”.

mansionobrera@yahoo.com.ar


http://www.mansionobrera.blogspot.com/



Véngase a la FLIA, vengase tranqui que lugar hay!

martes, junio 22, 2010

La aguja sobre la arena -- Matías Rafael Esteban






la biblia escrita con un diente de niño
la torre eiffel soldada con piropos
el sahara poblado de escamas
la luna comida como una masita por un escolar en invierno pedacitos en el matecocido
único como una aguja sobre la arena
mi amor se multiplica hasta
la pesadilla de la gotera absurda


lunes, diciembre 17, 2007

Los relojeros - por Matías Rafael Esteban


Anochece sobre el centro de Londres (alguien ríe al bajar de un carruaje camino a una fiesta). Mientras, en los barrios bajos continúa la lenta infección oscura que ha durado todo el día. Pausadas sombras caminan sobre las húmedas callejuelas. Son los tristes obreros con sus manos cansadas de telares y de largos cansancios. Una masa casi compacta de hombres que se desliza encajonada entre los altos muros de sus húmedas casas. En el aire hay un agudo olor a comida. Unos vapores que salen de los huecos de las ventanas traen vahos brumosos con lejano sabor a carne dudosa o a sangre coagulada, y cada tanto un lento y pesado tufo de excrementos anuncia las humedades arrojadas desde las alturas. Aquellos hombres caminan lentamente, apenas se rozan con sus murmullos y con sus rotas ropas. No se miran, se evitan como si sus íntimas calamidades fueran contagiosas. A lo lejos tras unas casas bajas, una fogata desdibuja los límites de la realidad. Las puertas se golpean cuando algún hombre cruza los oscuros umbrales hacia las habitaciones tenebrosas. Los pasos sobre la tierra se pierden.
Este es el único momento en que las familias se reúnen alrededor de un humeante o vaporoso plato de comida. El padre llega de los agotadores telares y de sus jornadas que arruinan las gargantas y los ánimos. Los niños vienen de coser larguísimas hilos que consumen sus existencias, sus deditos, sus mocos y sus ojitos lagañosos. Las mujeres se apresuran para preparar aquellas bazofias cremosas de colores insólitos, luego de manipular durante todo el día mil telas inmensas que jamás vestirán su piel. Sobre el barrio, el silencio predomina, y vive sobre las mesas de esas gentes. Entre ellos no hay comentarios, salvo algún hipo del padre que con la vista nublada mira los puntos de la madera de la mesa.
Pero, tras un ventanuco de escasas proporciones, al ras del piso, se oyen unas voces. Los obreros que caminan hacia sus casas saben que allí, otros se están conjurando. Los llaman “los relojeros” o “los locos”. Nadie entiende cómo pueden tener fuerzas para debatir o vituperar contra algo luego de tremendo esfuerzo diario. Se reúnen a la salida de las fábricas para juntar sus iras acumuladas. Todos han visto a uno, que es el que más grita. Se llama John Rockhen y es hijo del tendero, un buen hombre, alemán y grandote. John lleva su gorra sucia tapando sus orejas, encasquetada como si quisiese ocultar su pelo de bastardo rubio. Nítidamente se oye en el aire, la voz cascada de ron y peleas del joven John que dice: “...debemos hacerlo compañeros, y hacerlo hoy, sí, hoy porque nuestros hijos mueren tísicos en sus camitas sucias y nuestras escuálidas mujeres paren fetos muertos, y porque somos este hoy que se nos va sin que sepamos que se fue... compañeros, nuestros puños golpeando las desdichas tampoco nos asegurarán la felicidad o la inmortalidad, pero el valor que desprecia es lo único que nos queda... Hay cosas que los patrones tienen y que nos perjudican, esos objetos nos marcan como los hierros a las reses y nosotros somos sus vacas, compañeros, esas cosas se alimentan con nuestras almas. Compañeros, para ellos, somos la carne barata con que alimentan sus cosas…”. Una pausa, un largo silencio. Alguien tose. Un perro ladra a lo lejos. “Compañeros, ya no tenemos nada, casi, lo único que nos queda es la fuerza, y además, podemos elegir. O sea: o utilizamos esa fuerza rompiendo nuestros propios brazos y los huesitos de nuestros niños, o aplastamos sus hogares y sus planes con la fuerza de nuestro desprecio, con la furia de nuestra lucha... debemos decidirnos a hacer algo...”. Un rugido creciente lo interrumpe, son las voces de los que lo apoyan intentando convencer a los muchos que callan. Amaina el murmullo. Una voz se eleva, alguien dice: “Diles de los relojes...”. John se pone de pie nuevamente y dice: “Eso es sólo una parte, pero no hay que perder nuestro fin... eso no es todo…”. La voz lo interrumpe “por ahí dicen que con los relojes nos controlan, y que con ellos marcan lo que le queda a cada uno de vida para poder exprimirlo hasta el final” dice. John suspira y responde: “Eso es cierto, pero nuestro destino, el de nuestras acciones es el de triunfar para el alma del hombre, por nuestro ser que se agota tras las cosas que nos mandan hacer para ellos... romper sus cosas está bien, pero nuestro destino es ganar el mundo, no ganar el lugar de nuestros patrones... con sus relojes nos dictan los latidos de nuestros corazones, con ellos nos dicen el momento de nuestros sufrimientos, nos dominan algo que nos pertenece por el simple derecho de ser seres humanos, porque el tiempo no es los relojes. Cada reloj marca las conjunciones con las que giran los astros, marcan los días. El sol mueve los días bajo las reglas de su música divina, el reloj es simplemente un esclavo del tiempo que lo trasciende y lo supera... para lo único que sirve es para recordarnos que somos esclavos de esclavos esclavizados a esos artefactos... Compañeros, seamos como el sol que es divino como el tiempo y como el mundo, pero que hace sus propias reglas”. Y nuevamente un ruido de voces gruesas subió. Alguien gritó: ”¡destruyamos los relojes!” . Los gritos se hacen más fuertes y hay ruidos de movimientos. Salen todos, John sale a la cabeza. Parejamente se oye las voces juntas y entusiasmadas. Varias plazas son invadidas por seres desconocidos para aquellos ámbitos, los seres de la pobreza. Caminan decididos, van directamente con palos y machetes a destruir los relojes de la ciudad. Algunos son detenidos por guardias reales, otros apaleados allí mismo, varios mueren en medio de convulsiones. John Rockhen con su cráneo hundido y la gorra en la mano, escapa una corta distancia pero los guardias no le alcanzan pues cae de cara a un lodazal de barro viejo y muere al instante. Uno de sus compañeros en su escape espantado y enloquecido le pisa la cabeza, y tropieza. Luego se levanta y continúa con su carrera a los suburbios.